- El cantante asturiano Pipo Prendes rinde homenaje a Irene Villa, una mujer que transformó el dolor en inspiración para miles.
- Más de tres décadas después de aquel atentado, Irene sigue siendo voz y ejemplo de quienes no se rinden.
- Desde la Fundación Esther Koplowitz compartimos este homenaje a una de las figuras más valientes de nuestra historia reciente.
El cantante asturiano Pipo Prendes, reconocido por su sensibilidad artística y su compromiso con causas sociales, ha rendido un emotivo homenaje a Irene Villa, símbolo de superación y esperanza. Amigo cercano de la Fundación Esther Koplowitz, Prendes ha compuesto una canción que celebra la resiliencia y el coraje de Irene, quien transformó una experiencia traumática en una vida dedicada a inspirar a los demás.
La canción, llena de emoción y verdad, se convierte en un testimonio conmovedor de fortaleza y esperanza. Irene ha contribuido al proyecto añadiendo imágenes de su vida, enriqueciendo aún más el mensaje de la obra.
Desde la Fundación Esther Koplowitz, queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a Pipo Prendes por este gesto tan significativo. Su contribución no solo honra a Irene Villa, sino que también refuerza los valores de superación y solidaridad que promovemos.
Un atentado que marcó la historia de España
«En aquella época había una banda terrorista que ponía bombas. Aquel día decidieron masacrar Madrid, la capital de España. Y bueno, pues uno de esos tres coches fue el de mi madre. La bomba explotó justo antes de que me dejase a mí en el colegio. Bueno, aquello nos destrozó el cuerpo a las dos. Pero milagrosamente salvamos la vida».
Los que vivimos aquella etapa oscura y sangrienta de nuestra historia reciente recordamos ese atentado como una auténtica puñalada de dolor. Era el 17 de octubre de 1991, fecha en la que la banda terrorista ETA llevó a cabo un ataque brutal en Madrid que marcó para siempre la vida de Irene Villa. Un atentado que le provocó graves secuelas: perdió ambas piernas y tres dedos de una mano. Su madre, que conducía el coche en el momento de la explosión, también resultó gravemente herida.
Sin embargo, de aquel horror surgió una imagen inolvidable: la de una niña sonriente, reencontrándose con su madre en el hospital, a pesar de las heridas de metralla, convertida en un símbolo de lucha, dignidad y esperanza frente al terror.
«Volví a nacer gracias al amor de miles de personas.«
Irene Villa
Han pasado más de 30 años desde entonces. Hoy, Irene Villa es mucho más que una víctima del terrorismo; es psicóloga, periodista, escritora y madre de tres hijos. Forma parte del equipo de competición de esquí alpino adaptado de la “Fundación También” y ha recibido numerosos reconocimientos, como el Micrófono de Plata por su libro Saber que se puede. Y es fundadora y presidenta de la Fundación Irene Villa, que trabaja por la inclusión laboral y el deporte adaptado para personas con discapacidad. En 2013, fue elegida una de las ‘Top 100 Mujeres Líderes’ más influyentes de España.
Pipo rinde también un homenaje musical a María Dolores Pradera
Pipo Prendes, en colaboración con Pasión Vega, también ha rendido tributo a la inolvidable María Dolores Pradera con la canción «Cielo». Esta emotiva pieza, compuesta por Prendes, celebra la trayectoria de la icónica artista española y ha sido interpretada por ambos cantantes en diversos escenarios, incluyendo una reciente actuación en Oviedo.
La canción «Cielo» se presenta como un homenaje sincero y sentido, destacando la influencia perdurable de María Dolores Pradera en la música española. La colaboración entre Prendes y Vega aporta una profundidad emocional que resuena con el legado de Pradera, ofreciendo al público una experiencia musical conmovedora y respetuosa.
Este tributo se alinea con el compromiso de la Fundación Esther Koplowitz de promover la cultura y honrar a figuras destacadas que han dejado una huella significativa en la sociedad. La interpretación de «Cielo» por Pipo Prendes y Pasión Vega es un testimonio del poder de la música para conectar generaciones y preservar la memoria de quienes han enriquecido nuestro patrimonio cultural.