En la residencia Nuestra Casa de Collado Villalba, la semana pasada tuvimos la suerte de recibir una visita muy especial que se ha convertido en una hermosa tradición anual. Los protagonistas de este encuentro único fueron los alumnos de 5º de primaria del Colegio Everest, quienes dedicaron parte de su tiempo para compartir momentos entrañables con nuestros queridos mayores.
La jornada estuvo llena de risas, charlas amenas y actividades que unieron a dos generaciones creando momentos inolvidables. Los juegos fueron parte esencial de la mañana, con el bingo destacándose como una de las actividades preferidas tanto por los residentes como por los jóvenes visitantes. Además, no faltaron los emotivos villancicos que resonaron en todo el espacio, creando un ambiente festivo y cálido.
Esta actividad intergeneracional va más allá de la simple diversión; se convierte en una experiencia enriquecedora que beneficia tanto a los pequeños como a los mayores. La interacción entre diferentes edades propicia un intercambio único de conocimientos, vivencias y afecto. Los lazos que se tejen en estas ocasiones especiales perduran en la memoria, creando recuerdos entrañables en el corazón de todos los participantes.
En la Fundación Esther Koplowitz, valoramos profundamente estas iniciativas que fortalecen la conexión entre las generaciones y enriquecen la calidad de vida de nuestros residentes. Agradecemos a los alumnos del Colegio Everest, que ya han visitado esta residencia en otras ocasiones, por su tiempo, alegría y afecto, y esperamos con ansias futuras oportunidades para compartir momentos tan especiales como estos.